Nadie supo que las estrellas habían muerto.


Nadie supo
que las estrellas habían muerto.
Nadie escuchó el
fin del viento.
Nadie supuso
que la luna
recibía transfusiones de sangre
y se desvanecía por momentos.

Margarita Georgiadis


Pero aparecieron niños rotos
y nadie lo dijo por la tele.

Adriaan Brolsma


Supuraban los muñecos
y no había hospitales.
Eduardo Naranjo


Algunos se arrancaron
el corazón
y allí nadie dijo nada.
Los miembros de muchos
quedaron sepultados
bajo pupitres
y allí nadie dijo nada.
Los cubrieron
con pintura azul,
barnizaron
con capas excelentes
y allí nadie dijo nada.
Nadie entendió
por qué se vendían
ojos en bolsas.
Amanda Joseph


Nadie
era capaz
de arrancar
los brazos que
acuchillaban.
Ninguno clavaba
alfileres
en las lenguas.

Aron Wiesenfeld

Bocas feroces nos
devoraban,
y no supimos
recuperar los
trozos de carne,
que eran nuestros.
Amanda Joseph


Algunos nos vendieron
Ya no duran los días.
Se acabó,
han aparecido
aves extrañas que graznan
como terribles alcotanes.
Exhalan horribles chirridos
y portan cuerpos desfigurados.

Se presagia el frío.

Aron Wiesenfeld

Y nos persiguen.

Mientras,
rozamos letras,
acariciamos versos
y gritamos
aullando de dolor.

Margarita Georgiadis

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